Argentina – 2 Feb 2012 –
El secuestro de seis caballos y dos accidentes protagonizados recientemente por carros de tracción a sangre instalaron la discusión en la sociedad, provocando desencuentros entre el estado municipal, una ONG protectora de animales y los carreros que juntas cartoneros, plásticos y residuos.
Con el acompañamiento del presidente de la Asociación Vecinal de barrio La Cortada, este jueves 2 de Febrero, se anunció que todos los cartoneros de barrios Ombusal, La Cortada y todos aquellos que se quieran sumar de otros barrios de Reconquista «están invitados a la movilización que haremos en horas de la mañana», señaló el presidente de la Asociación Vecinal de barrio La Cortada, David Gobet.
En ambas instituciones, los movilizados entregarán un petitorio requiriendo:
1) Relevamiento de todos los carreros de toda la ciudad que se movilizan a tracción a sangre.
2) Diseñar un circuito de recorrido dentro de la ciudad y ampliar los horarios de trabajo que hoy están establecidos por Ordenanza.
3) Identificar a los carros con un color y un número que deberá surgir de la verificación municipal.
4) Definir las dimensiones que deben tener los carros de dos y cuatro ejes.
5) El carro debe ser conducido por una persona mayor de edad y un acompañante.
6) Instruir a los dueños en la prevensión de enfermedades y cuidados diarios que debe recibir el animal.
7) Estudiar la posibilidad de una cobertura de seguro ante cualquier siniestro.
8) El Estado debe financiar un Centro de Asistencia con un médico veterinario donde se puedan realizar consultas y en forma periódica control sanitario.
«El primer objetivo de todo esto es conservar al fuente de trabajo que tenemos todos», señaló el dirigente vecinal David Gobet en el programa «Agenda Personal TV». También Raimundo Figueroa estuvo en el programa y reconoció que «hay varios casos de malos tratos con el animal que tira los carros, pero lo que pretendemos es que cuando nos retienen el carro, nosotros sepamos adonde llevan nuestro elemento de trabajo al igual que al caballo».
Por su parte, Roque Franco exigió a las autoridades «que nos den pautas de donde, cómo y a qué hora tenemos que trabajar y pedidos que el radio de trabajo sea un poco más chicos dentro de los cuatro boulevares porque sino no podemos hacer el dinero necesario para llevar la comida a nuestra casa. En los últimos días, la sociedad nos estaba pasando por encima y nos pone como enemigos de ella, y nosotros no somos enemigos de nadie, solo queremos poder realizar nuestro trabajo». Leer el original
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